El arte románico brilla en Terres de Corrèze
Líneas sobrias, bóvedas de cañón, arcos de medio punto y esculturas son las señas de identidad esenciales del arte románico, que se extendió por los siglos XI y XII.
En la región de Terres de Corrèze se construyeron numerosas iglesias durante este periodo. A lo largo de los siglos, algunas de ellas se han convertido en testigos esenciales del románico, reflejando la habilidad de los constructores de la Edad Media.
Abadía de Uzerche Saint-Pierre
El arte románico se divide en escuelas regionales, y en Corrèze se conoce como arte románico lemosín.
En general, los edificios románicos son sobrios, en forma de cruz latina con crucero. En el interior, la nave suele estar flanqueada por estrechas naves laterales, con bóvedas de cañón, arcos de medio punto y columnas cilíndricas. A veces, el coro está rodeado por un deambulatorio que conduce a los ábsides.
En el El Camino de SantiagoLa iglesia abacial de Saint-Pierre d'Uzerche posee un deambulatorio y un raro ejemplo de campanario lemosín, también conocido como campanario "gâble", antaño punto de referencia para los peregrinos.
En el siglo XII, la escultura se convierte en el principal vehículo de transmisión del mensaje religioso que en el siglo anterior había transmitido la decoración pintada. Las iglesias de Vigeois y Lubersac contienen una notable serie de capiteles historiados de gran interés iconográfico.
